El Emperador Agustín de Iturbide, quien fuera consumador de la independencia y que posteriormente se declarara Agustín I, Emperador de México, fue derrocado tras solo un año de gobierno y mas tarde fusilado en Soto la Marina , Tamaulipas. Sus restos fueron trasladados a la Ciudad de México y depositados en una urna de cristal, la cual se encuentra expuesta en la Catedral Metropilitana.